viernes, 15 de noviembre de 2019

Oscar Hagerman, constructor de sueños



Por Victor Manuel Gutiérrez Sánchez

Una de las tendencias del diseño a nivel mundial que, afortunadamente, está ganando adeptos, es la que busca acercar al diseñador con el beneficiario de su trabajo, con el habitador de los espacios y objetos creados para resolver una necesidad humana. Esta necesidad funcional, no debería ser fría y numérica, en términos meramente pragmáticos, sino que también deben considerarse las llamadas necesidades emocionales.


“Creo que hay necesidades físicas y necesidades emocionales que el arquitecto debe tomar en cuenta. Las físicas son bastante más sencillas de captar, pero las emocionales tienen que ver con la identidad, con el mundo que buscas, y son tan importantes como las físicas o más”. Oscar Hagerman


Algunas de las propuestas más interesantes a nivel mundial, se enfocan en procesos de Diseño Participativo, en lo que en algunos países se denomina “diseño basado en el usuario”, con representantes como Cameron Sinclair, el fundador y líder de Architecture for Humanity, una asociación civil que se dedica a diseñar y construir comunitariamente con quienes lo necesiten alrededor del mundo, en situaciones de pobreza, emergencia, desastres naturales, o simplemente en comunidades integradas en torno a la solución de una necesidad común.
Uno de los principales representantes de esta postura, es Oscar Hagerman, español de nacimiento pero mexicano por motivos afectivos, quien enfoca su práctica profesional al diseño comunitario, en contextos tan variados como el de los estados de Puebla, Chiapas o Yucatán, en un campo de trabajo con infinitas recompensas, además y más allá de las económicas.
Para Hagerman, lo más importante al diseñar es lograr esa comunicación íntima con las personas para las que se diseña, y para ello recomienda cinco formas de acercarse a las personas para quienes se está diseñando:
1.       Hablar con ellos, construir un puente de comunicación verbal y vivencial al compartir experiencias cotidianas con las personas de la comunidad, relacionadas directa o indirectamente con el producto de su trabajo.
2.       Observar, una habilidad indispensable en todo diseñador, para percibir las necesidades, gustos, requerimientos y hasta prejuicios de las personas para quienes se diseña.
3.       Acercarnos a las gentes que conocen la comunidad y a quienes la comunidad reconoce, a estos actores les llama “persona-puente”.
4.       Buscar que lo que estamos diseñando sea flexible, no inamovible, lo cual conlleva una actitud más humilde por parte del diseñador, reconociendo en los usuarios el derecho a opinar en lo que s3e está diseñando, al ser los que mejor conocen la situación que antecede a  la llegada del diseñador.
5.       Finalmente, facilitar momentos de participación, esto es, procesos donde la opinión de las personas relacionadas con el proyecto sea tomada en cuenta, y que todos y cada uno de los involucrados perciba el producto final como la suma de sus aportaciones.
Esto, obviamente, resulta más fácil de decir que de hacer, ya que implica, de entrada, un cambio de mentalidad y una ruptura con ciertas inercias, que en opinión de muchos, han alejado al usuario del diseñador, los dos entes en torno a los cuales se encuentra el objeto de diseño, para resolver las necesidades humanas variadas, complejas y cambiantes con cada época.


“En las universidades  debería de haber una materia que nos enseñara cómo relacionarnos, cómo comprender lo que la gente necesita, y para eso hay que aprender a escuchar”. Oscar Hagerman


El 13 de Noviembre de 2012, Oscar Hagerman recibió, por parte del Arq. Manuel Villar, Rector de la UASLP, un reconocimiento a su aportación a la comunidad universitaria, principalmente de la Facultad del Hábitat, en donde es docente desde el año 2004. Con ello se reconoce una trayectoria caracterizada por la generosidad y la bonhomía de Hagerman, quien además ha recibido múltiples reconocimientos como el Doctorado Honoris Causa por la Universidad Iberoamericana o el Premio Prince Claus de Holanda, entre muchos otros.


“Tengo un amigo que dice que la educación es como subir a una montaña donde se amplía el horizonte y puedes ver el mundo”. Oscar Hagerman



El próximo martes 19 de Noviembre 2019, Óscar Hagerman recibirá el Doctorado Honoris Causa por parte de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, en el Centro Cultural Bicentenario, a las 18:30 horas. Entrada Libre.